martes, 9 de octubre de 2012

Soledad

Temida y amada soledad...sálvame!
Tanto tiempo esperándote, deseando tu encuentro que ya no recuerdo como éramos, cierro los ojos e imagino que libres jugando con el viento.
 Hace tanto que tu y yo no somos soledad, me dejé caer en la trampa de la vida, esa en la que se construyen castillos de cristal mágicos sobre la tierra y luego se quiebran los cristales, se rompen y caen como bellos destellos los vidrios rotos en el lodo, hundiéndose.
Ahora encuentro miedo cuando te observo y sin comprenderlo te deseo más todavía. Me volví cobarde soledad! Pensar que solíamos ser amigas tu me dabas la fuerza, nacían de ti las ilusiones y los sueños que aún suspiran.
Todo el hoy es confuso me perdí en los caminos de la vida, el tiempo se adueño de todo y mi sentir quedo atrapado en este viaje que no termina.
Para donde ir soledad? Si ya no te tengo, difícil es tomar decisiones sin ti, como quisiera tenerte algún tiempo conmigo...sálvame soledad! Vuelve. 
Mi corazón anhela tu calma y la alegría de saber que podemos, encuéntrame, abrázame, la cobardía me gana y yo te necesito.

miércoles, 15 de agosto de 2012

Desde adentro...

La encontré serena
su piel olía a tierra
y en sus ojos...
esos ojos que no miran
ví el ámbar sofocado
en un nudo de tristezas


La encontré besándose las manos
sucias de barro seco
sacudió los nudillos,
castigados por la piedra
pero aún escribía en el asfalto
para mí, eran totales incoherencias

La encontré en un sueño
sujetando las cadenas
de su peso se erguía
y de su fuerza, nacía la entereza

La encontré en la esquina de mi alma
sentada...
en el cordón de la vereda
sacó del bolsillo unas tizas
dibujó un limón y una fresa

La encontré mirándose en lo ajeno
socorriendo ausencias
violentando las mareas
las mías, las de la niña y de la tierra

La encontré suspirando
y al fin me miró con firmeza,
el ámbar cristalino, la soledad elegida,
el viento que cambia y yo
yo que la entendía

Cosas del querer...

No le encuentro fin al mar
como tampoco a mi querer
eres tu o soy yo?
Los que dejamos de creer
de las explicaciones que te doy
vaya Dios a saber
que verdades son del corazón
porque yo, no lo sé

No le busques a mi amor
algo lógico o de entender
es la vulnerabilidad
del que sufrió por el ayer
la confianza relativa..
y la sal que suelo ser
no le encuentres fin al mar
como tampoco a mi querer

jueves, 2 de agosto de 2012

Irina


Ondula su pelo y luego lo estira, juega con esos cabellos entre los dedos, se ríe, no disimula, busca con los ojos la ventana, desde el horizonte primero al infinito luego, parte el sol brillante quedándose quieto un instante , "Irina" parece que susurra, "dulce Irina" y los primeros rayos aparecen destellando en su mirada, una lágrima de verdadera alegría, ya no hay tiempo de quedarse inmersa en el cielo, sol que nace palpitándole en todo el cuerpo y la ilusión, es la misma que se expande.
Vuelve la mirada hacia el departamento, camina, pasos torpes, corre, salta, pasos nerviosos que la llevan hacia el vestidor, corre las perchas una por una fingiendo esmero por encontrar la prenda perfecta, sabiendo ya desde hace días que era lo indicado.."el vestido rojo" pensó y volaba..
Lo tomó con cuidado, lo abrazó como quien alimenta un sueño y lo cuida, lo deja acariciar entre los dedos mientras lo observa suspirando...sería causal de tamaños instantes alimentados con esa inmensa sonrisa? mordisqueó sus labios, fue hacia el espejo, el rojo nunca fue su color pero ese vestido nació para Irina, mujer que peligra de inocencia, mujer que trae puestas varias injusticias de la vida, la misma que a pesar de todo no pudo robarle la esencia, ni el espíritu, ni tanta dulzura que la embellece aún más que sus largas piernas y su todo...porque eso es Irina, casi parecida a la fruta prohibida, al pecado original que redunda en caer en las tentaciones y comer del árbol del bien y del mal, más yo creo que nadie escapa al menos una vez en la vida a este mandato, volviendo a Irina y fuera de mis creencias las mismas que se explican al verla, así es ella, tan real, y ambigua, la naturaleza no supo enseñarle a esconder sus sentimientos ni el tiempo y las heridas , a flor de piel, así es como vive "Irina" con el deseo ardido en su pecho , con el peligro inminente del amor en sus entrañas y la sangre, torrente que explota en su corazón siempre dispuesto a luchar una vez más.

Guardó la inocencia esta vez, el deseo mandaba y no podía hacer de oídos sordos, se vistió con la misma gracia que al desvestirse, con todo el poder de su imaginación latente, busco los zapatos, pocas veces usaba tacos, eran como siempre sus largas piernas limitantes, quizás soñando con la altura de los acontecimientos que vendrían supuso que los tacos pisarían todo límite, además de ser bien bonitos, y el vestido lo amerita pensó "Irina" terminó de arreglarse tomo la cartera como quien
toma las riendas y salió a la calle.

Las tres menos cuarto, hora de la siesta, el calor del verano se hizo presente, el escote de Irina padecía de un leve transpirar perfumado que bien podría enloquecer a cualquiera, si algo tenía de irresistible era sin dudas esa piel casi perfecta (y digo casi para no caer en las trampas de la perfección que no existe) bien podría decirlo entonces si jugara a ser poeta, así en verdad podría afirmar que es dueña de una piel perfecta, sin marcas ni escrituras, descocida de vergüenza, blanca, suave y quieta , espontánea , sublimada, como dije "perfecta"
Salió del subterráneo se acomodó con sus manos inquietas entre el gentío imposible de transitar, subió las escaleras impasiente, acurrucándose como podían los pasos en los escalones y por fin llegando a la calle, cruzó la avenida , un huracán golpeaba su mente desenfrenada, no podía contenerse, camino unas cuadras, observaba todo sin mirar, el sol, las palomas de la plaza, los enormes edificios de la capital , los quioscos de diarios, los puestos de flores, taxis por doquier, yo no sé si Irina capto algo de todo esto, creo que sólo estaba levitando, viviendo por primera vez el sueño prometido.
Levantó la mirada ahí estaba, ese era el hotel, cruzó las puertas como quien cree en los milagros, toco el botón del ascensor , esperó chasqueando el piso con los tacos, apretaba los puños y volvía a morder sus labios, tan rojos como el vestido, tan sigilosamente pintados. Contó los pisos en su mente, miraba los botones, los espejos como niña que por primera vez subía a un ascensor.
Piso 4 habitación 18 creo que esos números quedarían como un sello en el cuerpo de Irina, tocó la puerta así como buena vecina que se le antoja caer de visita, (tenía que disimular) el corazón se desbocaba y podría quedar torpe y simple ( como si eso fuera malo...que tenía aquello de malo? ) Si era su simpleza una gran virtud y su torpeza, bueno ya siempre fue así de andar volando.
Los segundos, eternos, pasaron y al fin la puerta se abrió, el rostro de Irina hablaba por si solo ni ella percibió el tamaño de su sonrisa, dejándole los cachetes gorditos y los ojos exaltados enormes inyectados de brillo. Los nervios ya no estaban, el deseo la abundaba y el corazón ya no era su oponente.
_Irina!
_pasa niña!
Apenas la puerta se cerro se encontraron en un abrazo, apenas se miraron se cerraron los labios en un beso y apenas de ese beso nacieron más y más besos, en la comisura de los labios, del apretar fuertemente la carne fructífera de sus bocas, las lenguas encajaban perfecto, se miraban, se mordían, cerraban y abrían los ojos, acariciaban sus contornos. La apretó contra su cuerpo, la miraba dulcemente amarraba su pelo tenaz y suavemente, la beso aun más intenso con los labios empapándose, del cuerpo al alma, de la punta de los pies a la cabeza se estremecía entre sus brazos, agitada la respiración de Irina embravecida, echa furia, el papel de princesa ya no le quedaba, era una linda mujer que sabía lo que quería sin temor a nada, el salvajismo le brotaba por la piel, no le hacían falta las palabras.
_hay Irina ! en un suspiro susurrando dijeron como pudieron sus labios
_tanto te busque entre mis sueños. Agitada la respiración, ella no lo soltaba
Absolutamente nada dijo Irina, sonrió descarada, lo empujo hasta la cama, cayeron los dos con el peso bien puesto, se distanciaron apenas unos segundos, uno al lado del otro mirando el techo. Irina flexionó sus piernas dejando deslizar el vestido hasta las caderas acomodó rápidamente sus manos entre ese huequito que siempre queda, sutilmente suspiraba mientras se hamacaba suavemente jugando. El se volteo de costado para mirarla, desde los tacos entre las piernas, la cintura atada
por un lazo, el escote, el cuello, los rulos alborotados sobre el cama.
Aún sin recuperar el ritmo normal de la respiración, el apenas deslizó por fuera sus dedos en esas piernas, ella seguía cómplice sonriendo, sin mirarlo, quería dejarse, sabía muy bien de la forma que él la estaba observando. Siguiendo el camino esas manos, los pasitos de los dedos llegaron al lazo, fue allí donde la ternura se convirtió en desenfreno, lo desató con ganas, abrió de par en par el vestido como si este tuviera alas, bruscamente se acerco a Irina, rozó sus labios en el cuello, aferro su mano en la cintura recorrió insaciable su cuerpo , mientras se alimentaban los besos en el cuello, rozó el corpiño, apretó sus pechos, volvió a sus piernas, ahora desatado, las recorrió por dentro, jugaba carreras hasta el principio de su sexo. Ella no pudo contenerse, le devolvió esos besos con esmero, suspiro con un pequeño sonido encerrado en una "m" apretada.
Se enredaron, se ardían, se mojaban, se alimentaban, uno del otro, como si se hubiesen esperado por años. Irina se terminó por quitar el vestido como pudo y le quitó la camisa, uno a uno los botones con desenfado, le aflojo el cinturón, lo miró fijo a los ojos con el veneno de la pasión, el entendió, se quito los pantalones, dejo que ella hiciera lo que le venga en ganas, dejó que su boca juegue , los gemidos comenzaron a salirse, yo no sé si Irina los escuchaba era tal el desenfreno que no podía captar aún todo lo que sucedía. El la tomo con fuerzas, la volteó boca abajo, levantó su pelo para desnudar su cuello, por encima de su cabeza dejo caer los brazos de ella sujetándole fuertemente ambas manos con una sola de las suyas, trepaba su espalda con los besos que no dejaban de ser tiernos, golpeaba las nalgas con su pelvis entrándose en su cuerpo, cada vez más fuerte, los gemidos se caían de los labios de ella que ponía resistencia en el juego, se resistía para que la agarre más fuerte y no pueda soltarse, luego se dejaba ganar para que el le regale esa ternura que nacía, que siempre tuvo y tendrá.
Ya de frente los dos, el encontró su mirada, su sonrisa sus labios, vio esos dos lunares rojos pequeños y lindos junto al pecho izquierdo de Irina, volvió a entrarse en ella tan confiado, como si la conociera de toda la vida, presionaba la pelvis contra la suya, los cuerpos ahora parecían un estorbo, se amarraron, se sentían, la fricción aumentaba, las palpitaciones en colapso, el calor transpirando, la sangre alterada, el éxtasis, la furia, la magia, el amor, la piel que explota y el corazón llegando al pico más alto de la montaña, allí donde parece que uno muere por esos instantes que el alma se eleva y el aire se desvanece, allí donde todo culmina dejándonos el sabor más rico de la vida.
Debía marcharse, lista y de pie Irina lo contemplaba anudando el lazo, tomó su bolso busco su mirada...si eso era, vio el mismo amor que imaginaba, sonrió se acerco para besarlo, con esos besos que se dan con el alma y no con los labios, se alejó apenas hacia la puerta
_Sabes que he pasado mi vida viajando por el mundo y eso es lo que hago...no puedo quedarme, sabes también que te seguiré soñando. Ella lo miraba, estaba tan feliz, el no entendía acaso ?
_Vas a escribirme verdad?
Se envolvió unos segundos en un hermoso silencio y luego dijo sus primeras dos palabras
_Te quiero
Ahora sí marcho la puerta sin mirar atrás, cruzo el pasillo, subió al ascensor, nunca supo si había gente allí (creo que ese día todo era una ilusión) se miró al espejo, radiante, iluminada, se arreglo apenas los rulos y escucho en su mente la ultima frase que el le dijo...vas a escribirme verdad?
Nunca se dió cuenta que ella lo estaba haciendo en este instante, en este papel, en este sueño.

miércoles, 18 de julio de 2012

Yo Te Amo



Paso a paso, en la extensa fila de almas
protegidas todas por el sol quieto
en el celeste inmenso...
invierno.


En las manos, una flor, cada tres
en otras...
cartas de agradecimientos
pasos serenos, pasos sinceros...
almas vestidas de esperanza al vuelo
de los cielos los milagros
de tus brazos, el amor materno


Desde lejos o tan cerca
minutos, horas, tiempo...
almas que cruzan fronteras
ajenas, propias,
en lo incierto
de temor, o de espera
apaciguadas...
detienen los relojes y rezan


Un paso, dos y tres, me esperas!
cercana siempre tu presencia
te veo ... oh! dulce mujer
nada se de ti más que tu luz
me llamas, lo sé...
siento ahora mi corazón bordado
de tus hilos.

Te miré sin cuerpo,
rodaba la sal...
al mirarte, una , y mil lágrimas
alma despojada que te contempla!
cristalina y abocada a ese único instante
mis silencios gritando, perdon!
lidiando con sus martirios el cuerpo
y mis manos... solas
elevándose a lo desconocido

habitas en mi, me empapas, me abrazas
lates en mi, renazco...en tus manos
caricias que calman


vuelvo a casa, las horas no han sido charco
no te conozco, aun así te siento
Oh! dulce mujer Yo Te Amo
brillando la luz de mañanas nuevas
que no saben de leyendas...
más tu amor,  alcanza.



jueves, 28 de junio de 2012

Despedida

Yo no sé si he vivido, o partido lo suficiente
sabrá mi alma, arañando las paredes del cuerpo
las miradas que creí mías las recuerdo cristalinas
y los otoños atrapados en cada repetición del tiempo
en los horizontes de los sueños chillan los rieles infinitos
orillando nuestros pasos, cerrando los  caminos
destino caprichoso, de los días, de los tiempos, de la vida y de lo eterno

De esa misma estación he partido y he vivido tantas veces...
anudaría nuestros dedos si pudiera , y mordería tus labios
hasta brotar de tu boca,  una enredadera que del tiempo nos resguarde,
y nos llene de rosas y con cada rosa el recuerdo
de besos y de espinas, porque duelen

He vivido y he de partir amor mío! los otoños ya no pueden esperarnos
el suelo necesita de las hojas y que los árboles lloren con nosotros
El agua que fue blanca mientras nos vestía,  se vuelve tirana...
en mi casa sin paredes, sin silencios que no me dejan llorarte
 entonces es ahí cuando desnuda, cada día, cada ducha desdichada
me encuentra mi sollozo más profundo
sonoro encanto que ahora me hiela el alma...
tu voz perpetua es melodía, las pestañas empapadas de tristeza
las tuyas, las mías, la mirada...que no pudo
despedirnos.

Yo no sé si he vivido, o partido lo suficiente
en los mortales terrenos colapsa el desatino finito
no llores amor mío, no llores te lo pido!
demasiada tristeza abunda entre las calles
tus manos han sido sangre al igual que lo son mis lágrimas rotas
prométeme que me olvidas y viviré de  ese olvido
cuando el tiempo no sea muralla y el martirio del amor
inocente!
encuentre consuelo, el amor, nuestro amor se eleve...
y en los claros de una mañana logremos despedirnos
ya sin ser espina y rosa...como clavel del aire se abracen los suspiros.



miércoles, 20 de junio de 2012

El Viejo

Gotas de lluvia
Frió dolor
El mundo se detuvo un instante
Y hasta el cielo lloro

El DIA de la bandera
El emblema quedo
Marcado en nuestras almas
Y el invierno llego

Su reloj sigue marcando
La hora de su adiós
Siempre lo llevaba consigo
Como amuleto se aferro

Se que había paz en su alma
Y su rostro reflejo
Cada último minuto
Sus ganas de decir adiós

Ese ultimo momento
Dejando su sufrimiento
El supo estoy segura
Que no estaba solo

Que estaba lleno su corazón
Hay viejo te nos fuiste!
Pero te llevaste pedacitos de nosotros
Para siempre con vos

Que tantos recuerdos tengo
Y se tantos otros tienes
Que me crie a tu lado
Que me diste tanto

Y solo vos viejo…
Sabes de que te hablo
De lo que me decias
y lo que me enseñaste

Te quiero abuelo!
desde donde estes…
(hace 4 años un día como hoy...)

lunes, 4 de junio de 2012

Otoño, mareas y mi taza de té con canela

Juegan esta madrugada
la cuchara y mi té con canela
me detengo a mirar la taza
el girar de las mareas...
despierta el frío una vez más
con mi desvelo casi corriente
los silencios de mi casa...se parecen a mí
verdaderos porque duelen.

Un otoño hecho invierno
cuatro de Junio a quien te pareces?
te ví en los ojos de un adolescente
que pretendía una sonrisa mía
sólo, para sentirse alegre

Te ví y no me animaba a verte
cuatro de Junio a quien te pareces?
pretendías un beso sin pedirlo
porque tu niñez estaba al filo de la muerte
jugábamos una amistad verdadera
o no nos dimos cuenta?
claro está, que por tontos y cobardes.

cuatro de Junio a quien te pareces?
volviste a mí como obligación del destino
diez otoños más tarde...
con los mismos ojos, dulce miel
tan iguales a los mios
quebranto del silencio!
una verdadera tempestad de versos
que andaban escondidos.

cuatro de Junio a quien te pareces?
llegaste al fin como un suspiro
imponente, furioso...
desafiando aquellos caminos esquivos
el ángel que nos vió, aún sorprendido
siendo testigo!
subio a los cielos con sus piruetas
sin poder creer, como podía ser pecado?
aquel beso tan bonito!
tus labios frustrados...
encontrando lo perfecto y genuino
tus labios y mis labios
pasión que tus versos no habían escrito
tus labios y mis labios
melosos, perpetuos...
se conocían desde siempre
solo les faltaba lo efímero
algo tan simple y verdadero como un beso bonito.

cuatro de Junio a quien te pareces?
vienes y vas como las mareas
de mi taza de té con canela
yo hubiera sido aquel pájaro
como cuenta la leyenda
hubiese elevado mi canto
y clavarme en la espina que más hiera
porque amarte así siempre valió la pena.

martes, 29 de mayo de 2012

El pájaro canta hasta morir...la leyenda

Hay una leyenda sobre un pájaro que canta sólo una vez en su vida, y lo
 hace más dulcemente que cualquier otra criatura sobre la tierra.
 Desde el momento en que abandona el nido, busca un árbol espinoso y no descansa hasta encontrarlo. Entonces, cantando entre las crueles ramas, se clava él mismo en la espina
más larga y afilada, Y al morir envuelve su agonía en un canto mas bello que el de la alondra
y el riseñor. Un canto sublime, al precio de la existencia. Pero todo el mundo enmudece
para escuchar, y Dios sonríe en el cielo. Pues lo mejor solo se compra con grandes dolores
...al menos, así lo dice la leyenda.
The Thorn Birds

martes, 15 de mayo de 2012

La Muñeca de Trapo

Saltando la soga..
 sigue su camino habitual,
 la muñeca de trapo
 se tapa los ojitos con botones del camino
 cose con su aguja, ata sus hilitos
 une y remienda cada herida...
 con retazos y trapitos


 Su corazón estaba envuelto de telas vigorosas...
 esplendido el rubí como radiante la novia
 fuertes los hilados, mantenían su entereza
 pues parecía de porcelana y no de trapo...
 sorprendía su belleza

 sabía como encontrar en cada cielo
 fantasías nuevas
 le cantaba a las estrellas, festejaba en luna llena
 no tenía calendario, solo una vieja libreta
 llena de sueños de muñecas...
 fotos ,tintes de colores, dibujos y poemas
 en el amanecer y en el ocaso , agradecía la magia de estar viva
 contemplaba así la luz un buen rato
 bailaba y giraba ella sola con sus trapos
 jugaba a ser princesa, no importaban sus hilachas
 ni el hilito colgando de sus medias.

 obscurece... ni en las flores a pensado
 deja la soga tirada, vuelve a su casa
 la muñeca de trapo
 solo trae un manojo de botones
 uno por cada estrella mal soñada
 retazos de telitas mal cortados,
  malgastado el hilo de sus medias
 cree!
 siente así el corazón, de puros trapos
 y no se da cuenta la muy incrédula
 tenia que ser muñeca!
 que sigue envuelto por telas nobles
 de rubí encendido...
 y el amor eterno?
 sigue allí en su cielo de estrellas.